Firegirl.

La amo y la odio, ella simplemente me odia. Quizás sea por esa combinación de sentimientos por lo que llevamos tantos años aguantándonos. Es sexy, divertida, inteligente y violenta. No duda en clavarte sus nudillos en tu hígado si le dices algo que no le gusta, aunque eso ya lo llevo bien, no porque sepa agradarla siempre, si no porque me he acostumbrado a sus "caricias". Es la acompañante ideal para ir al cine, siempre que no escoja ella la película, y cuando vamos a cenar demuestra tener un apetito voraz, pero sin embargo no engorda, sus curvas siguen siendo perfectas. Cuando hacemos alguna escapada con el coche, ella se deja llevar, nunca coge el coche ni te dice por donde ir, simplemente saca sus pies desnudos por la ventanilla e incluso a veces canta, ella me pregunta si canta bien, y yo le sonrío, para no mentirle. Un beso firegirla, que aún nos quedan muchas cosas buenas por compartir.